jueves, abril 02, 2009

El río Perla en su paso por Guangzhou

Desde algún sito desciende
eso es seguro
pienso

como todo lo que nace y perece
y esta ahi unos unos minutos o amplias eternidades
para el asombro de los otros
o su inofensiva indeferencia
en algún sitio surge

lenta quizá rápidamente

a mí, como sea, solo me queda imaginar un hilo de agua
que brota a borbotones
en la punta de alguna montaña escondida en la niebla

verdes arrozales
bueyes atascados en el lodo
cimas que de blancura en otra lengua
reverberan
hombres que hacen el amor
a sus mujeres
de algún modo distinto

allá será, imagino,
sin apelar a Heráclito de Efeso
un río diferente

porque aquí es solo un olor de muerte
y pudrición
un tapete de inflamadas escamas suspendidas
y ojillos apagados
una mancha de aceite y agua jabonosa rumbo al mar